Dialogando en el Café Salambó

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martes, 27 de julio de 2010

Cruz vs. Gabo

Juan Cruz, le dijo una vez a Gabo en casa de Carmen Balcells:
- Gabo, no quiero morirme sin hacerte otra entrevista.
Y me dijo, veloz, jugando con una miga de pan:
- Pues no te mueras.
(página 61, de "Egos revueltos" XXII Premio Comillas. Col. Tiempo de memoria. Tusquets Editores)

domingo, 25 de julio de 2010

A VECES

Escribir un poema se parece a un orgasmo:
mancha la tinta tanto como el semen,
empreña también más en ocasiones.
tardes hay, sin embargo,
en las que manoseo las palabras,
muerdo sus senos y sus piernas ágiles,
les levanto las faldas con mis dedos,
las miro desde abajo,
les hago lo de siempre
y, pese a todo, ved:
¡no pasa nada!
Lo expresaba muy bien César Vallejo:
"lo digo y no me corro"
Pero él disimulaba.

ÁNGEL GONZÁLEZ

Tópico



 
Estamos hechos de tardes de domingo. De esos momentos en los que nuestra alma está al límite de sus posibilidades y somos capaces de asistir al nacimiento de una nueva arruga o una nueva cana que nos aleja de la vida. Y crece el saco de la añoranza y de la prisa por vivir todo aquello que va tiñéndose de utopía. Y echamos mano de un libro, de un texto, de un poema que nos confirma la tragedia del tiempo. Tardes de domingo en las que parece que todo se ha terminado. El final de un tío vivo en el ánimo de un niño que siempre quiere más, que nunca entiende por qué dura tan poco el paseo.

El lunes estrena una nueva ilusión de estar vivo en una carrera de fondo hacia los sueños. Una forma también de pagarse el tiempo mientras lo pierdes, para ganarte una nueva tarde de domingo.