Dialogando en el Café Salambó

Dialogando en el Café Salambó

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domingo, 16 de marzo de 2014

sábado, 8 de marzo de 2014

Librería Lello & Irmâo, Porto.

Visito Oporto

  

con motivo de una convención nacional de mi empresa y el último día me escapo a la librería Lello e Irmâo, una de las más bonitas de Europa.


 


Curioseo, paladeo ese fetichismo al que me arrastran los libros, imagino ese número infinito de historias que hay detrás de cada estantería, detrás de cada ejemplar, y finalmente encuentro una personal.

  

Tropiezo con un libro de poesía editado por Calambur, Os surcos da sede (Los surcos de la sed) de Eugénio de Andrade, un poeta contemporáneo de prestigio. La traducción es de José Ángel Cilleruelo, y me quedo con el libro, lo rescato. Pero la carambola no está en el traductor, que lo es y que es uno de los más reconocidos traductores de literatura portuguesa, sino en que José Ángel es amigo mío y así, cierro la historia personal de mi primera visita a este santuario.


Después, escojo un poema del autor, ahora sin azar alguno, y lo traigo aquí.

ESCREVO
(Escribo)

Escrevo já com a noite
(Escribo ya con la noche)
em casa. Escrevo
(en casa. Escribo)
sobre a manhâ em que escutava
(sobre la mañana en que escuchaba)
o rumor da cal ou do lume,
(el rumor de la cal o de la lumbre,)
e eras tu somente
(y sólo tú eras)
a dizer o meu nome.
(quien decía mi nombre.)
Escrevo para levar à boca
(Escribo para llevarme a la boca)
o sabor da primeira
(el sabor de la primera)
boca que beijei a tremer.
(boca que besé temblando.)
Escrevo para subir
(Escribo para ascender)
às fontes.
(a las fuentes.)
E voltar a nascer.
(Y volver a nacer.)

domingo, 2 de marzo de 2014

Ahora que amaneces.

Ahora que amaneces
Felipe Sérvulo
Madrid, 1ª edición, abril de                 2013
Poesía. Editorial Playa de                  Ákaba S.L.
ISBN: 978-84-941025-1-6


Ahora que amaneces es un poemario de amor entregado a la causa, al placer y al gozo del sentimiento que mueve al mundo y a la poesía. De hecho, ese es el sello identificativo de su autor, Felipe Sérvulo, poeta jienense y catalán de adopción, como el mismo se declara.
Son cuarenta y cuatro poemas que ponen el acento en esos momentos minúsculos pero imprescindibles en las veinticuatro horas de un poeta y, en este caso, de un poeta enamorado. Enamorado del amor, de lo femenino, de la lluvia y de la ciudad de Barcelona, otro elemento presente en gran parte de los poemas. La voz poética de Felipe Sérvulo está al servicio de ese ideal de amor que es espiritualidad y sensualidad a un tiempo, que vale para su amada y para todas las mujeres del mundo reunidas en una, con el marco de la ciudad cobijadora y vigilante, húmeda y canalla de fondo. El amor, un suburbio… dice en uno de los poemas titulado Se adormece Barcelona.
            Se trata de un poemario dulce que apenas pasa de puntillas por el desamor, por el dolor contrapunto inseparable del amor y que si acaso lo hace en algún momento fugaz, lo hace camuflado de la nostalgia de los momentos amorosos que sin duda, un día se perderán llevados por el tiempo. Quizás de ahí la cita inicial de esa mítica escena de Blade Runner (1982), dirigida por Ridley Scott en la que el replicante Roy Batty, interpretado por el actor Rutger Hauer improvisa estas bellas palabras:
(…) Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como... lágrimas…en la lluvia.
           Es como si la única amargura del amor fuera simple y rotundamente el miedo a perderlo. Pero Felipe no acaba la cita que en la película termina diciendo: Es hora de morir. En este caso, en Ahora que amaneces sería hora de amar. Morir, amar, dos caras de la misma moneda. Los amores que matan que nunca mueren que diría Sabina.
            Pero yo no quería hacer con esto una reseña al uso sino la crónica de un encuentro y del placer de haber conocido al poeta Felipe Sérvulo.
            Eso ocurrió antes de ayer viernes 28 de febrero en el Café Salambó de Barcelona. El encuentro con el poeta fue organizado y moderado por Cati Gómez, miembro del Club literario Marina. También estuvimos otros profesores, escritores, lectores y amigos como Guadalupe Mendoza, Mercedes Gascón, Mariela Puértolas, Herminia Meoro, Susana Tomás, Alicia Blanco, Eugenio Asensio, Pedro Lara, Enrique Clarós, José Luis Rebollo, Javier y un servidor. En la cabecera de la mesa, además de Cati y Felipe, estaban Blanca Ruiz del colectivo de escritores El Laberinto de Ariadna y el también poeta Alfonso Levy que nos regaló con una semblanza profunda y muy espiritual de Felipe Sérvulo.
            La cabecera de la mesa leyó una buena selección de poemas del libro a la que yo sumaría mi personal selección que, curiosamente solo coincidió en un poema Cinco minutos, leído por Cati:

            EN cinco minutos te habrás ido,
            ahora que la vida es un torrente
            y tantas cosas quedan por decir.

            Llueve. Llueve dentro de nuestro hogar
            y no puedo recorrer la ciudad sin ti,
            ahora que ofrezco mis venas
            para que inyectes tanto amor como desees.

            Importan miradas, pactos, una señal…

            Y compartir ilusiones, ahora
            que todo se cumple inexorable,
            abres la puerta, me abrazas,
            derrotas el tiempo y quiebras la noche.

            Porque en poesía, nos enamoramos de unos poemas y no de otros, o de unos más que de otros, a menudo por razones mágicas. Y podemos explicarlo y divagar todo lo que queramos, e incluso ponernos intelectuales y acertar en teorías literarias, pero lo que sucede en realidad es que el poema nos lee a nosotros, como dijo alguien en la mesa, o lo que es lo mismo, rescata matices olvidados de nuestros recuerdos, algo íntimo que nos hace vibrar, desempolva el sentimiento. Puede ser una estrofa, un verso, una sola combinación de dos palabras a veces. Y eso es lo que nos conmueve.
            También me ocurre con Iré donde estés.

            MÁS allá de L’Eixample,
            se pierde la mirada
            y los crepúsculos rebosan destierros.

            En la linde habitan otros vecinos:
            funcionarios de la Generalitat,
            profesores, abogados,
            algún freelance…

            Iré donde estés:
            Horta, La Pau, Sant Adrià,
            Palau Reial o Gavarra;
            qué sería un metro sin tus huellas.
           
            La amada y la ciudad unidas por la pasión del poeta, inseparables, lo que me ha llevado al recuerdo de una frase rescatada de una lectura de hace tantos años, en una de las novelas de la tetralogía del cuarteto de Alejandría de Lawrence Durrell y que decía: una ciudad es un mundo cuando amamos a uno de sus habitantes.
            Y podría citar más versos y poemas pero yo no quería que esto fuera una reseña más sino solo una forma de celebrar el descubrimiento de un buen poeta, humilde y autorizado a un tiempo en su trato y su discurso, y de celebrar un reencuentro con mi ciudad y mis amigos letraheridos. Ahora que amaneces será para siempre el título de este reencuentro.
            Gracias Felipe, y gracias también a la editorial Playa de Ákaba por el acierto en la publicación.

Tigres de papel




Ha nacido una nueva editorial, y hay que alegrarse. En un país en el que algunos recortan hasta cerrar la cultura, otros, valientes como tigres, plantan cara con Tigres de papel. Mi amigo, el gran poeta Paco Moral, es uno de los principales artífices. La editorial Tigres de Papel que en principio se lanza en verso, acaba de publicar sus dos primeros poemarios. "El agua" (poesía 2002-2012) de Miguel Ángel Curiel y "Antes de desaparecer" de Laura Giordani.


sábado, 1 de marzo de 2014

Reseña de Las tres caras de la moneda en el blog del escritor y periodista Jordi Cervera.


28/02/2014: Las tres caras de la moneda
Categoria: Autors
Escrit per: Jordi Cervera
Jorge Gamero (Barcelona 1965) fa anys que es belluga pel sector editorial, tot i que ho ha fet des de l’àmbit de la producció i l’edició de textos educatius. Tot i així, i cada vegada amb més freqüència i encert, va fent el salt a l’altra banda, al costat fosc, al dels escriptors de ficció. Va aconseguir una reeixida aportació a la literatura juvenil amb “Simón, no; Saimon”, publicat per Alfaguara i ara repeteix amb “Las tres caras de la moneda”, una interessant col•lecció de contes que publica l’Editorial Gramática Parda i el retorn a un gènere que ja havia conreat amb “El leedor fósil”, un llibre publicat per l’enyorat Josep Maria March a March Editor. (...)
   
 http://blogs.catradio.cat/jordicervera.php?itemid=52969

Saimon en Palma de Mallorca



El pasado lunes 24 de febrero Saimon visitó el colegio Sant Agustí, de Palma de Mallorca y el IES Sarenal, de Llucmajor, para charlar con nuevos alumnos lectores. Una nueva experiencia, siempre enriquecedora.



Sant Agustí


IES Sarenal